Vuelta al cole. Época COVID

Llevo intentando escribir sobre la vuelta al cole desde que nos dieron la charla del nuevo curso, pero me está costando tanto... tantísimo...que como siga así voy a contar la vuelta al cole cuando termine el primer trimestre. Y oye, no vendría mal hacerlo para entonces, ya que el protocolo nos lo cambian cada dos días y así no hay quien encuentre una rutina estable... pero en fin.. A ver que sale de esta entrada con el patiburrillo que tengo en la cabeza entre la preocupación, el miedo y la ilusión de verla crecer e ir al cole contenta. 

Compras:

Antes que llegara septiembre, en mis vacaciones, me fui de compras para tener ropa para la peque, y por si nos confinaban me volví loca en el Tiger y en una tienda especifica de manualidades. Así que tengo para hacer manualidades para todo un año. Ups! 
Además, estuve mirando por Internet un lugar donde comprar mascarillas HOMOLOGADAS reutilizables, porque desde marzo estábamos usando las higiénicas y entre el dineral y el medio ambiente, mejor de tela reutilizables. Y compramos 3 para cada uno. Y una que es friki no pudo evitar comprar de Avengers y de Harry Potters. Para la niña de Sirena, de arcoíris y de la patrulla canina.

Sentimientos:

Cuando empezó a acercarse el momento, empezaron las disputas entre políticos y profesores, entraron también las AMPAS y por supuesto los padres. Ese abandono a la educación ha pasado factura a nuestras familias. Ha vuelto el MIEDO, el terror, la ansiedad, la inquietud, las preocupaciones... 

Hemos mandado a nuestros hijos a lugares sin medios suficientes para luchar contra la pandemia. Con un profesorado abandonado con los pocos medios que tienen, haciendo todo lo posible por hacer seguro un entorno no preparado; y encima, esos políticos ahogando a las familias, amenazando con luchar contra el absentismo con mano dura. Y mientras, los padres, con la cabeza hecha un lío y sin saber que es lo mejor para nuestros hijos. Con miedo a todo y con el alma en vilo. Porque.. si no los llevamos, ¿Quién puede ir a trabajar?

Con todas esas, nosotros decidimos llevar a la peque al colegio. Es una niña que necesita a más niños con los que jugar y sociabilizar. Le gusta la escuela y necesita ese contacto. Y qué cambio!! ¡Es otra niña!

Pautas Covid:

A pocos días de comenzar, tuvimos una reunión presencial para explicar cuales iban a ser las pautas para los niños de P5 (tres líneas, 5 años A, B y C) sin bajar ratios. Pautas que ya han variado tras 10 días de clases y que han hecho mover de nuevo los horarios familiares de horas de sueño, comidas, recogidas y entradas. Porque lo que me duelen en el alma en todo este lío de pandemia, es que no piensen en la CONCILIACIÓN. Un tema que siempre dejan olvidado. 

Empezaron contando cual iba a ser el periodo de adaptación: Los dos primeros días entrada a las 11.30H, salidas a las 13horas. Los siguientes dos días, entrada a las 11h. y salida a las 13.45h. Luego ya horario de 9.15h a 14.15 horas. 

¿Qué queréis que os diga? ¿Cómo puedo conciliar con ese horario trabajando como trabajo a 7 kilometros del colegio y con un horario coincidente justo en esas horas? ¿Tengo que pagar a alguien para que me la entregue y recoja? ¿Le digo a mis padres, mayores ambos, que lo hagan cuando el virus es a quien más ataca? De verdad que no lo entiendo. Se que lo hacen por los niños, pero tienen que pensar que hay padres que NO  pueden tener ese tipo de horarios de adaptación. 

Luego las entradas y salidas. El cole dispone de 4 puertas y las abrieron todas para que fueran escalonadas y no tuvieran contactos padres y tal... Tras 10 días han pasado a tener solo 3 puertas abiertas y a cambiar horarios. Ahora la llevamos de 8.45 a 13.45h. 

Las normas de convivencia en era COVID: Evidentemente imposible tener 1.5 m de distancia, no es necesario las mascarillas por ser menor de 6 años, pero quien quiera que las lleve, dos mascarillas para cambiársela en la mitad de la jornada. Se lavan las manos con gel cada dos por tres. Tienen que venir ya con la temperatura tomada desde casa. La seño lleva mascarilla y bata EPI. 

Hay que lavar el babi y la talega todos los días. Y la ropa también "estrenarla" limpia todos los días. 

Al principio sacaban a todos los de infantil juntos al patio así que la burbuja que pretendían hacer a la mierda: 140 alumnos todos junticos sin miramientos. Ahora parece que van a hacer dos recreos separados por tiempo.... a saber. 

Se que están haciendo esfuerzos titánicos para intentar que sea lo más seguro para los niños, profesores y padres.. pero lo que aparentemente debería de ser tranquilizador, es cada día más preocupante. No solo por el colegio en sí, sino por los corrillos de padres y cosas por el estilo.

¿Extraescolares sí o no?

Esa era otra de las dudas que nos surgió a la familia. ¿Metemos otra burbuja más o nos quedamos quietos? Éramos un mar de dudas. Hasta que llegó una carta desde la academia donde recibe clases nuestra peque. Las pautas de prevención eran 1000 veces mejores que en el colegio: Son solo 6 niños por clase. A pesar de ser infantil de 5 años, TODOS van con mascarillas; tienen una alfombra donde se limpian los pies antes de entrar con productos desinfectantes, le toman la temperatura, y le echan gel hidroalcohol. Distancia de seguridad y muchas canciones y juegos separados. Así que aceptamos el segundo reto de salud. Y ella encantada!!

Nuestra ratona:

El caso es que para ella, la vuelta al cole ha sido muy positiva. La peque está mucho más tranquila, más contenta, más concentrada, feliz y como siempre no para. 

Va al cole contentísima. Su talón de aquiles eran las entradas y la fila, pero este año, los primeros 10 días lo hacía con gusto e iba feliz cual perdíz. Desde ayer entran sin hacer fila, como los niños mayores, directamente sola hasta la clase, y no veáis que cambio. Todavía más feliz. 

Aguanta la mascarillas horas y horas.. Por la mañana lleva una, cuando llega la hora de comer se la quita, la pone en su plastiquito, la mete en la talega y cuando termina de desayunar, coge la limpia de su cajita y se la pone. No se la toca, no se la quita. Así que soy feliz por esa parte. 

Lo de la distancia de seguridad con sus amigos lo lleva peor. No lo puede evitar, pero con los adultos sí la respeta. 

La higiene también la lleva bien, me pide el gel cuando toca algo que no debe, y si está jugando soy yo la que se lo recuerdo. 

Nosotros, los padres:

Pues nosotros estamos preocupados, nerviosos y aterrorizados de que pueda coger el bicho y ponerse mala. Pero al verla tan contenta y feliz se nos pasa. 

Tenemos que hacer 2 lavadoras todos los días cuando nosotros hacíamos una a la semana. Pero es que una es para las mascarillas y otra para el babi y la talega (aprovechamos para meter lo que ensuciamos el día anterior). Así que el gasto en agua va a ser bonito. 

Hemos tenido que hacer encajes de bolillo para llevarla y recogerla estos días. Por desgracia siempre es mi marido que es autónomo el que sale perdiendo, y la verdad es que no se cómo arreglar eso, ya que en mi trabajo son bastantes estrictos con esto de los días.  Pero al final soy yo la que la llevo y él el que la recoge. No hay otra manera. 

La vuelta al cole está siendo muy diferente y estresante, pero estamos intentando hacer de ello una rutina y acostumbrarnos a vivir con el bicho y a seguir adelante con mucho cuidadito. Con mascarillas, distancia social y mucha higiene. Esperemos seguir bien. 

¿Y vuestra vuelta al cole?


 

1 comentario:

  1. Mi hija ya es mayor así que problemas ya de llevar y recoger, ninguno. Y por ahora todavía no ha pisado el instituto. La clase se ha dividido en dos, y una semana va un grupo y la otra semana el otro. Cuando está en casa está viendo las clases online... Si no hay problemas con las conexiones... Que curiosamente es el profesor de TIC el que más problemas tiene. Ya la semana que viene le toca ir a clase. Aunque por lo visto ya hay rumores de que dentro de poco podrán ir todos. A ver cómo acaba esto. Y este curso encima le toca la selectividad. No sé yo si van a ir muy preparados. En fin, ya nos remos contando.
    Besotes!!!

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