Saludando y volviendo a las andadas a pesar de la ansiedad

Han pasado 9 meses. Parece imposible, la verdad, pero sí. Nueve meses desde mi carta de despedida a mi primo. 

Llevamos ya 1 año y 5 meses de pandemia. Aquello que veíamos venir de China y que parecía lejano, lleva mucho tiempo ya entre nosotros y va calando el ánimo a muchos. Otros, parece que no tanto, ya que siguen haciendo vida normal a pesar de que la incidencia sube y vuelven las restricciones y el miedo. Pero está visto que no a todos por igual. 

Por casa no nos podemos quejar. Todos estamos más o menos bien, con achaquitos pero bien. Y los abuelos de mi peque, es decir, nuestros padres, están bien también. 

Yo de ánimo voy regular. La ansiedad es mi compañera de batallas y hace que no me apetezca cosas que antes adoraba. Así que me he liado la manta a la cabeza, y he dicho.. ¿Como? Hay que recuperar aquello que me gustaba: escribir en blogs, leer, puzzles... Y aquí ando de nuevo. Llamando tímidamente a la puerta para saber cómo estáis todos, si seguís por aquí, y cómo andáis por estos mundos blogueros. 

Nos leemos en breve.